25 de abril de 2009

Participación de los Mayores en el COAPEMA

Tras las ultimas elecciones en el Consejo Aragonés de las Personas Mayores, se abren unas expectativas de participación, que creo supondrán un antes y un después, en la participación de los mayores.

Tendremos que colaborar en las políticas activas tendentes a mejorar la calidad de vida de los mayores, ser parte activa en la sociedad, sobre todo en aquello que nos concierne, para ello necesitamos que la colaboración entre el Consejo y las asociaciones de mayores, sea lo más efectiva posible.

Las Asociaciones de Mayores tendremos que colaborar con la Comisión Permanente del Consejo para que la presencia de los mayores en todos los órganos de participación, den resultados acordes con nuestra necesidades.

Todo esto para promocionar el envejecimiento activo, con la integración de los mayores en su comunidad, sin renunciar a las actividades ludicas (tan necesarias para nosotros) como los juegos de mesa, excursiones, baile, talleres ocupacionales etc., que cumplen un importante papel social en las relaciones humanas y previenen situaciones de soledad y aislamiento, fomentar la formación cultural y el acercamiento a las nuevas tecnologías y las relaciones intergeneracionales.

Corresponde pues a la Comisión Permanente impulsar, dinamizar y diseñar programas que contribuyan a la participación activa de los mayores en la sociedad.

El reto es apasionante, y con la participación de todos podremos conseguir que el Consejo Aragonés de las Personas Mayores, tenga el peso que le corresponde en defensa de los intereses de las personas mayores y la participación de estos, hacernos oír en la sociedad y ocupar el espacio que nos corresponde.

16 de abril de 2009

Poema a los Amigos

No puedo darte soluciones para todos los problemas de la vida,
ni tengo respuestas para tus dudas o temores,
pero puedo escucharte y buscarlas junto a ti.

No puedo cambiar tu pasado ni tu futuro.
Pero cuando me necesites, estaré allí.

No puedo evitar que tropieces.
Solamente puedo ofrecerte mi mano para que te sujetes y no caigas.

Tus alegrías, tu triunfo y tus éxitos no son míos.
Pero disfruto sinceramente cuando te veo feliz.

No juzgo las decisiones que tomas en la vida.
Me limito a apoyarte, a estimularte y a ayudarte si me lo pides.

No puedo impedir que te alejes de mí.
Pero si puedo desearte lo mejor y esperar a que vuelvas.

No puedo trazarte límites dentro de los cuales debas actuar,
pero sí te ofrezco el espacio necesario para crecer.

No puedo evitar tus sufrimientos cuando alguna pena te parte el corazón,
pero puedo llorar contigo y recoger los pedazos para armarlo de nuevo.

No puedo decirte quién eres ni quién deberías ser.
Solamente puedo quererte como eres y ser tu amigo.

En estos días ore por ti...
En estos días me puse a recordar a mis amistades más preciosas.

Soy una persona feliz: tengo más amigos de lo que imaginaba.
Eso es lo que ellos me dicen, me lo demuestran.

Es lo que siento por todos ellos.

Veo el brillo en sus ojos, la sonrisa espontánea
y la alegría que sienten al verme.
Y yo también siento paz y alegría cuando los veo
y cuando hablamos, sea en la alegría o sea en la serenidad, en estos días pensé en mis amigos y amigas
y, entre ellos, apareciste tú.

No estabas arriba, ni abajo ni en medio.
No encabezabas ni concluías la lista.

No eras el número uno ni el número final.
Lo que sé es que te destacabas por alguna cualidad
que transmitías y con la cual desde hace tiempo
se ennoblece mi vida.

Y tampoco tengo la pretensión de ser el primero,
el segundo o el tercero de tu lista.

Basta que me quieras como amigo.
Entonces entendí que realmente somos amigos.

Hice lo que todo amigo: Ore...
y le agradecí a Dios que me haya dado la oportunidad
de tener un amigo como tú.

Era una oración de gratitud: Tú has dado valor a mi vida...

Jorge Luis Borges